Anécdotas de la 2ª Guerra Mundial

  1. Dado que para las tropas norteamericanas era tremendamente difícil bombardear Tokio (no tenían ninguna base aérea cercana), no se les ocurrió otra cosa que usar murciélagos adiestrados a los que adherían bombas en las alas. Por suerte, al final no pusieron en práctica este método tras sufrir unos cuantos incidentes durante las pruebas (con incendios incluidos).
  2.  También se encargaban de campañas propagandísticas para, al más puro estilo Goebbels, erosionar la moral nazi. Dentro de éstas, se remitieron cartas en las que se comunicaba a los familiares que un soldado había fallecido. O diseñaban falsos sellos postales con la imagen de Hitler en forma de calavera. O introducían octavillas entre las tropas alemanas en las que se contaba que las mujeres con maridos en el frente tenían que acudir a una granja de reproducción de las SS.
  3. Incluso existió un plan para introducir hormonas femeninas en la comida de Hitler.
  4.  Otro proyecto descabellado fue el de intentar dañar los puertos alemanes usando… ¡icebergs! Estos sí que parecían de Bilbao: “Oye Patxi, qué te parece si arrastramos un par de icebergs desde el Polo Norte y los lanzamos contra las costas alemanas”. Tampoco se llevó a cabo por razones obvias.

1 comentario:

  1. genial. Me gustan muchísimo estas anécdotas. Ahora falta que en clase las comentéis.

    ResponderEliminar